Proyecto de Vida
En la escuela del Espírito Santo – 13
BRASIL
Liberada del virus
La manicura Bruna Oliveira, de Río de Janeiro, aumenta el número de quienes superaron el temible covid-19. No hace mucho, ella estaba luchando contra la muerte en un hospital. “Estuve 18 días en el hospital, de los cuales 11 estuve intubada en la UCI“, recuerda la joven. Su drama comenzó en el parto de su hija. “Mi bebé nació el 6 de mayo. Salí de la maternidad contaminada, pero asintomática”. Todo cambió cuando Bruna regresó a casa. En pocos días, su salud empeoró, su presión aumentó a 23 y tuvo dificultad para respirar. Bruna llegó al hospital todavía en el periodo del puerperio y con una saturación de oxígeno peligrosamente baja. La situación evolucionó rápidamente: alrededor del 80% de sus pulmones fueron tomados por el virus y sus riñones casi se paralizaron. Sedada, no sabía nada: “Los médicos le dijeron a mi familia que solo un milagro me salvaría“. Así que los hermanos de la Iglesia de la Gracia oraron sin cesar a favor de Bruna. Contrariando todo pronóstico, ya no necesitaba el respirador. En poco tiempo, tuvo su salud restaurada. “Salí del hospital sin caminar, pero, en dos días, volví a hacerlo con normalidad, para la honra y la gloria del Señor“.
BRASIL
De pie, con Cristo
Según una investigación del Instituto Nacional de Metrología, Calidad y Tecnología (Inmetro), el 37% de los traumas que causan hospitalización en Brasil ocurren en el hogar, especialmente entre los ancianos. Sucedió con el ama de casa Maria Dalva dos Santos. “Cuando estaba lavando ropa, me caí y fracturé la cadera“, recuerda. Al llegar a la sala de emergencias, Dalva se enteró de la gravedad del caso. “El médico me dijo que no podría someterme a una operación. Tendría que permanecer inmóvil hasta que se consolidara la fractura”. Una mañana, Dalva no pudo dormir debido al dolor. “Encendí la televisión y, en este momento, se transmitía el Show de la Fe, presentado por el Pr. Jayme de Amorim, quien dijo que había espectadores incapaces de caminar, pero que Dios los sanaría”. Ella creyó en el poder divino y participó en la oración. “Poco después, me sentí fortalecida y me levanté“, celebra. Después de un año, Maria camina con normalidad. “Es hermoso lo que el Señor hace por medio del Dr. Soares y de su equipo“, dice, agradecida.
PERÚ
Recuperó el habla
La parálisis facial es un trastorno con orígenes neurológicos que puede dejar secuelas permanentes. Esa era la perspectiva de la peruana Mariela. “El médico dijo que mi tratamiento duraría seis meses“, explica. Aun así, no había garantía de éxito. Ella también tenía dolor de cabeza. Con fe, Mariela se aferró al Señor. “En la Iglesia de la Gracia, le rogué a Dios que me sanara“, recuerda. Ahora ella habla con normalidad. “¡Gracias a Jesús, estoy sana!“
PERÚ
Ella está liberada
Diana estaba desesperada por la pérdida de un hijo, sintiendo un intenso dolor en su cuerpo. “Mi mente estaba perturbada“, recuerda. En una ocasión pensó en suicidarse, luego oró por la ayuda de Dios. El mismo día, Diana fue a la Iglesia de la Gracia en Lima, en la capital del Perú. “¡Tan pronto comenzó la oración, todo pasó!“, dice, maravillada. “¡Me siento liberada!“.
ARGENTINA
Orgulloso de patrocinar
Un diagnóstico de osteoporosis progresiva significó 30 años de sufrimiento para Rosalina Reis. Aunque se sometió a varias cirugías, nada resolvió su grave estado de salud. “Mis músculos estaban tensos. No podía pararme o peinarme“, cuenta. “Ninguna medicina aliviaba mi dolor“. Después de pasar casi tres noches sin dormir, vio un programa diferente en la televisión. “El Dr. Soares habló de una señora que no había dormido, pero que estaría bien“. Fortalecida después de la oración, Rosalina incluso logró sostener la taza de té, lo que no hacía desde hace mucho tiempo. “¡Desperté a mi esposo y lloramos juntos, felices!“ Hoy, ella es patrocinadora del Show de la Fe. “El Señor nos ha dado una vida cómoda. Colaboramos con este trabajo con orgullo“.