Proyecto de Vida
Proyecto de Vida
“TODO LO QUE ESCRIBÍ EN MI PROYECTO DE VIDA SUCEDIÓ”
Para la sudafricana Princess, el Proyecto de Vida abrió puertas que antes se consideraban imposibles
Miles de personas, en todo el mundo, han sido bendecidas a través del Proyecto de Vida, una campaña realizada en todos los templos de la Iglesia Internacional de la Gracia de Dios (IIGD) en Brasil y en el exterior. Idealizado por el Dr. Soares, este movimiento de fe es el medio por el cual los sueños del pueblo de Dios se presentan en el altar del Señor el último día del año. Cada persona escribe sus peticiones en su propio formulario y, en seguida, se lo entregan a los pastores. A partir de ahí, es creer y esperar el cumplimiento de las promesas divinas.
La campaña ha cambiado la historia de personas como el de la Chef de cocina Princess, de Sudáfrica. “Conocí la Iglesia de la Gracia en 2015, a través de un pastor que me invitó a recibir oración”, recuerda la joven, de 30 años. Ella empezó a asistir a las reuniones de fe regularmente después de las clases de la universidad. “Empecé a crecer en la fe, participando en los encuentros”. Una de sus peticiones al Señor era, precisamente, para su futuro en la vida profesional. “En 2016, escribí mi Proyecto de vida. Le pedí a Dios que me bendijera con un trabajo que me permitiera cuidar de mi familia y apoyar Su obra”.
“Primeros frutos”
En junio del año siguiente, incluso antes de graduarse, Princess tuvo la bendición de un puesto de trabajo. “Empecé a recibir tres veces más que en el trabajo anterior”, dice con alegría y agradecimiento. Con este recurso, ella puede ayudar a su mamá mensualmente. Además, contó con la colaboración de su jefe para costear el curso. “Dios tocó su corazón”, dice.
Con su fe fortalecida, Princess Spelman puso a prueba el amor de Dios una vez más. “En 2017, escribí mi otro prospecto: le pedí al Señor que me bendijera con una casa propia”. Ella también especificó cómo sería: “Quería mi casa en una zona bonita”. En enero de 2018, recibió una herencia familiar. “Honré a mi Dios con las primicias”, recuerda.
Tres meses después, Princess comenzó a construir una gran residencia de tres habitaciones en Eastern Cape para alquilar. “En octubre de ese año compré mi segunda vivienda”. Que está ubicada en la costa de Ciudad del Cabo, muy cerca de la playa, como Princess siempre soñó. “Todo lo que escribí en mi Proyecto de vida sucedió. Y hay muchas más bendiciones de las que podría hablar”.